“El éxito no es la clave de la felicidad. La felicidad es la clave del éxito.”
Albert Schweitzer
Clima organizacional
Las personas se agrupan para formar organizaciones por medio de las cuales puedan lograr objetivos comunes imposibles de alcanzar individualmente. Las organizaciones que alcanzan esos objetivos compartidos, es decir, las que tienen éxito, tienden a crecer. Ese crecimiento exige más personas, cada una con objetivos individuales lo que provoca un distanciamiento entre los objetivos organizacionales y los objetivos individuales de los nuevos participantes. Para superar el posible conflicto potencial entre esos objetivos, la interacción entre personas y organización se complejiza y dinamiza para funcionar como un proceso de reciprocidad basado en un contrato psicológico lleno de expectativas mutuas que rigen las relaciones de intercambio entre personas y organizaciones.
Por un lado, las organizaciones ofrecen incentivos o estímulos, y por otro, las personas brindan contribuciones a través de su trabajo. El equilibrio organizacional depende del Clima organizacional que representa el sentimiento transmitido por el ambiente de trabajo, es decir, cómo interactúan los participantes, cómo se tratan las personas entre sí, cómo se atiende a los clientes, cómo es la relación con los proveedores, etcétera. Cada característica se presenta con distintos grados y conflictos. Se pueden distinguir dos tipos extremos dentro de un continuum: el estilo tradicional y autocrático o el estilo participativo y democrático.
El clima organizacional representa el ambiente interno entre los miembros de la organización, y está íntimamente relacionado con el grado de motivación existente. Las personas están en un proceso continuo de adaptación a muy diversas situaciones con objeto de satisfacer sus necesidades y mantener cierto equilibrio individual. Esta adaptación no se restringe a la solución de las necesidades básicas, sino que también comprende la satisfacción de las necesidades sociales de estima y autorrealización. Como la satisfacción de las necesidades superiores depende mucho de otras personas, en especial de las que ocupan posiciones de autoridad, es importante comprender la naturaleza de la adaptación o desadaptación de las personas. La adaptación, como cualquier otra característica de la personalidad, varía de una a otra persona y, aun en un mismo individuo, de un momento a otro. Esa variación puede entenderse como un continuum que va desde una adaptación precaria, en un extremo, hasta una excelente adaptación, en el otro. Una buena adaptación significa salud mental.
Las tres características principales de las personas mentalmente sanas son:
a) Las personas se sienten bien consigo mismas
b) Se sienten bien en relación con otras personas
c) Son capaces de enfrentar las demandas de la vida y de las circunstancias.
En este sentido es importante destacar que el clima organizacional está íntimamente relacionado con la motivación de los miembros de la organización.
Clima laboral Alto: se da cuando la motivación entre los participantes es elevada, el clima organizacional tiende a ser elevado y a proporcionar:
- relaciones de satisfacción
- ánimo
- interés
- colaboración entre los participantes
- buen clima laboral
- mayor productividad
- aumento de autoestima
- menor índice de ausentismo
- bajo nivel de conflictos
- fomento de las relaciones interpersonales
Clima organizacional bajo: se da cuando la motivación entre los miembros es baja, ya sea por frustración o por barreras para la satisfacción de las necesidades individuales. Se caracteriza por:
- estados de desinterés
- apatía
- insatisfacción
- alto índice de ausentismo
- conflictos
- estados de inconformidad
- agresividad o tumulto
- aumento de accidentes de trabajo
- baja productividad
- situaciones en las que los miembros se enfrentan abiertamente contra la organización
El concepto de clima organizacional expresa la influencia del ambiente sobre la motivación de los participantes, de manera que se puede describir como la cualidad o propiedad del ambiente organizacional que perciben o experimentan sus miembros y que influye en su conducta. Este término se refiere específicamente a las propiedades motivacionales del ambiente organizacional, es decir, a los aspectos de la organización que causan diferentes tipos de motivación en sus participantes.
El clima organizacional es alto y favorable en las situaciones que proporcionan satisfacción de las necesidades personales y elevan la moral; es bajo y desfavorable en las situaciones que frustran esas necesidades. El clima organizacional influye en el estado motivacional de las personas y, a su vez, recibe influencia de éste: es como si hubiera una realimentación recíproca entre el estado motivacional de las personas y el clima organizacional. Por lo general el intercambio entre incentivos y contribuciones genera ganancia para la empresa.
Marcelo Cristale
Director del Centro de Capacitación Profesional América Latina CCPAL